Gabino pregunta: ¿Qué es exactamente la dirección espiritual? veo que en muchas de sus respuestas recomienda la dirección espiritual como un medio muy bueno para el discernimiento vocacional ¿Es lo mismo que la confesión?
Estimado Gabino,
¡Buena pregunta! A veces al responder las consultas que llegan uno puede presuponer muchas cosas y te agradezco sinceramente que me ayudes a ir a lo fundamental. El acompañamiento y la dirección espiritual son buenos medios para quien está pensando en cómo ser cura o consagrar su vida a Dios, pero también para cualquier cristiano que aspire a mejorar en su vida cristiana, así que veamos:
¿Qué es la dirección espiritual?
La dirección espiritual es un medio de santificación que ofrece la Iglesia a través del cual el director (frecuentemente un sacerdote o una persona consagrada, aunque también puede haber laicos preparados para ello) y el dirigido, en un diálogo en la fe y bajo la acción del Espíritu Santo, van descubriendo la voluntad de Dios para el dirigido.
Es una práctica que inició desde los albores del cristianismo, y se arraigó particularmente en la experiencia de los padres del desierto. Luego la dirección espiritual e ha ido consolidando a lo largo de la historia, al grado que es sumamente recomendada por los papas y prescrita, incluso, para los candidatos al sacerdocio.
Características esenciales
Al acudir a la dirección espiritual ten en cuenta sus características esenciales como la confianza y apertura del dirigido con el director, la visión sobrenatural, el procurar tener un director fijo para que te conozca y te ayude a fondo. En este enlace puedes encontrar algunas indicaciones útiles.
La dirección espiritual se puede dar también en la confesión y coincidir con ella. Sin embargo, también puede ser un encuentro separado de la confesión sacramental, con la ventaja de que puedes extenderte más, sin necesidad de «bloquear» la fila de confesiones de tu parroquia en un fin de semana.
Ojalá puedas valorar las maravillas que Dios hace a través de este medio y te sirva para seguir a Cristo más de cerca. ¿Te ha ayudado?