¡Año nuevo vida… ¿nueva? ¡depende de lo que elijas! más aún si está en juego la realización de tu vocación. Así que más bien: año nuevo… ¡preguntas frescas!
¿Cómo convertir el 2019 en un año fecundo? ¿Cómo tomar buenas decisiones durante el resto de este curso? Hay algunas preguntas que te pueden ayudar para elegir bien tus actividades y la Ahorainversión de tu tiempo.
Empezamos:
¿Soy de los que «esperan» que todo salga bien o de los que «trabajan» para que todo salga bien?
Ahora, hoy, cada día, cada hora bien aprovechada es más eficaz para tu crecimiento espiritual que encontrarse al genio de la lámpara maravillosa. Tu futuro depende de tu presente y de tus decisiones. Tómalas sabiamente. Dios bendice a quienes invierten bien y con inteligencia sus talentos.
¿Por qué debería importarle a alguien que yo me levante mañana?
¡Esta pregunta tiene miga! y sirve para remover las cortinas de nuestra habitación cerrada y que entre la luz. Es la pregunta por el SENTIDO de tu vida. Vuelve a leer la pregunta. Háztela. Quizás te dejas llevar del momento, de las inercias, de lo que hace tu grupo o los demás en general, pero preguntándote «por qué debería importarle a alguien que yo me levante mañana?» y respondiéndolo… puedes entender el por qué de tus estudios, de tu carrera, de tu entrada en el seminario o de invertir tu tiempo de verano en un buen curso vocacional. Tras esta pregunta se oculta el sentido de tu vida.
¿Qué temores me atan?
Exacto… aunque te creas Juan Sinmiedo los temores se cuelan como hormigas por cualquier rendija y en un instante… ya están contigo. Y los temores son quienes más condicionan tus elecciones vocacionales. Seguir a Dios puede asustar, pero pensándolo bien, en caso de que siguieras a Dios por donde te llama… ¿qué problema habría? Ninguno. Él jamás dejaría que ese acto de generosidad cayera en el vacío o se volviera contra ti, Dios es bueno y nadie puede ganarle en generosidad. Hay que desenmascarar los miedos que nos atan en la toma de decisiones y desprenderse de ellos.
¿A qué espero para cambiar el futuro?
Ten esta frase en cuenta y tu vida se pontenciará como nunca. La tentación de seguir como siempre es grande. Pero cuando ves los dones de Dios, tus talentos y tu libertad… no pueden carecer de propósito. Dios cuenta contigo para cambiar el mundo a mejor. Puedes hacer los cambios necesarios desde ya mismo. Sólo hay un buen momento para cambiar: ahora.
¿Y si Dios me transforma… cómo llegaría a ser?
Parece que esta pregunta no cuadra con tu futuro, pero sí que lo hace. La respuesta a esta pregunta revela un panorama amplísimo y lleno de esperanza, pero te la tienes que responder. La única manera de construir con firmeza es desde esa seguirdad de que Dios estará presente en tu vida de fe, en tus decisiones, en tus propósitos y en tu mejoría. Nada más irreal que imaginar un futuro sin la intervención real de Dios en tu vida! Pídele cambiar cada día aquello que te está fastidiando de ti mismo, aquello que ya te tiene harto… y verás qué efectos tan sorprendentes.
¿Quiero hacer algo extraordinario o morirme de sueño?
O sea, tú eliges a qué ritmo vas a vivir el año. Si en tu vida se ha instalado la rutina, la mediocridad, la pereza o la tibieza… puede que no te atrevas ni siquiera a proponerte algo noble, grande, santo… sacúdete estas actitudes y déjalas atrás ya mismo. El año que comienza no es para vivir como si fueras un ferrari que sólo va en primera. Lánzate a cosas grandes y que ruja el motor que llevas dentro.
¿Qué quieres de mí?
Ésta simple pregunta es eficacísima en la oración, porque en ella no sólo vas a pensar. Resulta que hay otra persona implicada que te escucha y espera tu permiso para hablarte. Además lo único que busca es tu bien. No hacen falta cursos especiales ni técnicas ni sitios raros: arrodíllate y pide luz: «qué quieres de mí» es la pregunta vocacional por excelencia y el resultado no es predecible, simplemente abre tu alma a lo que Él quiera comunicarte y la llena de luz, seguridad y paz.
¿Qué te parecen éstas siete preguntas para iniciar el año?
Y si quieres buenos ambientes donde hacerte todas estas preguntas, los encontrarás aquí: «ACTIVIDADES VOCACIONALES»
P. Miguel Segura, LC